
Te despiertas por la mañana, te desincrustas las legañas con litro y medio de café, levantas la tapa del portátil y FELICIDAD MÁXIMA:
Un pedazo de salseo en Facebook para empezar bien el día.
Hay de todo: trols, católicos enfadados, gente que dice "Yo no soy racista pero ____"...
Te quedan solo diez minutillos raspados para salir pitando por la puerta si no quieres llegar tarde al curro.
"En el metro no hay internet" piensas. Y sabes que necesitas acabar de leer esos comentarios como necesitas el aire que respiras.
Pero eres una persona de recursos, viste hasta la versión del director de MacGyver, así que encuentras una solución. Siga leyendo esta interesante historia aquí . . .
Fuente: PlayGround
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.